martes, 30 de noviembre de 2010

No tengo


No tengo razón. No tengo un camino. No tengo la solución. No tengo un destino. No tengo principios. No tengo certezas. No tengo motivos. No tengo valor. A menudo, no tengo fuerzas. No tengo... no tengo disciplina. No tengo tesón. No tengo esposa. No tengo autocontrol. No tengo métodos. No tengo ritos. No tengo costumbres. No tengo pasado. No tengo aspiraciones. No tengo limitaciones. No tengo patria. No tengo una bandera. No tengo pudor. No tengo miedo. No tengo..

Qué pocas cosas tengo.

lunes, 29 de noviembre de 2010

Nieve

Nieva en Madrid.

Caen los copos blandos, livianos como pacíficos paracaidistas.

Pienso en el nevar con nostalgia. A cámara lenta.

La nieve profunda en la montaña en la que me echaba de bruces cuando niño, asombrado por su suavidad.

Y luego la nieve en una bola, dura y con mala leche. O la nieve helada del glaciar. O el alud que mata. O en el desierto nevado, inhóspito de los Polos.

Pienso en como se puede trocar lo dulce en hielo duro. Impenetrable. O en dolor.

Nieva en Madrid, mientras, yo recuerdo aquella frase que decía que mi fuerza emanaba de mi capacidad para la ternura.

O algo así.

domingo, 28 de noviembre de 2010

Tirón de orejas

Tienes toda la razón Dixtinta.

Y me salen los colores de vergüenza.

No tengo excusa.

Pido disculpas, qué otra cosa puedo hacer.

Han sido dos meses flojos. Pero vuelvo, te juro que vuelvo. No sé cuántos lectores ha por ahí. Cuántos como tú dices han pasado por a2manos y se han vuelto decepcionados de que siguiera colgado el mismo post desde hace semanas. No tengo mucho contacto con el exterior, es decir, vosotros, excepto por los escasos comentarios.

Y por el tirón de orejas.

Vuelvo.

Ya estoy aquí.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Mejor


Ella (la barca) allí, yo (un tonto que mira) aquí...

Ella tumbada en la arena.

Yo mirando el cielo de Madrid.

Cojo la bici.

Me da el aire en la cara mientras escucho música.

Ahora mejor.

martes, 16 de noviembre de 2010

Nada Yo

Suena al otro lado de la ventana el sonido familiar del camión de la basura. Es el sonido que escucho cuando me quedo a escribir. Podrían ser las olas, o algún pajaro o incluso el tráfico de la gran ciudad, pero no, es el ruido del camión de la basura. Puntual a su cita a las 12, la hora de Cenicienta. siempre con la misma cadencia. Podría ser una carroza, tirada por caballos blancos ¿suenan los caballos blancos distinto de los tordos o los negros?

La mesa está desordenada.

La vida también.

Demasiados días de lluvia,

quizá sea tiempo de movernos hacia el Sur.

Demasiada prisa, demasiada compañía, demasiada soledad.

Siempre serás la dueña de esa mano en blanco y negro que da vueltas al café.

Después del camión, silencio.

Nada.

Yo.

Mudanza

Han pasado 7 años y pico desde que nació a2manos . Y ha sido una de las experiencias más emocionantes de mi vida. Auténtica, arriesgada...